ACTINIA EQUINA

Conocida comúnmente como “tomate de mar” por su llamativo color rojo. Es una anemona propia de sustrato rocoso donde se fija mediante una ventosa.

Este invertebrado marino cuenta con unas filas de tentáculos que le sirven para atraer el alimento y llevárselo hasta la boca.

Suele verse cerca de la superficie y alguna vez en charcones litorales. Pueden aguantar la desecación durante algún tiempo porque acumulan agua en su interior.

Para localizarla tendremos que mirar en lugares bien iluminados o ligeramente umbríos donde el agua este bien oxigenada. Es por esto que suele ocupar la zona más cercana a la superficie del agua, donde el oleaje es más notable. Puede ocupar gritas en las rocas, paredes o extraplomos.

A este mismo grupo pertenece otra anemona conocida como “ortiga de mar”, pero en este caso vive siempre sumergida, es de color pardo amarillenta con los tentáculos rosados o morados.