Diego y Francisco son nativos y residente en Los Lobos, en Cuevas del Almanzora, donde quieren seguir viviendo, disfrutando de una calidad de vida que quieren conservar para futuras generaciones.

Pertenecen a la Asociación de Amigos de la Sierra Almagrera, una entidad sin ánimo de lucro, iniciativa de los vecinos de esta pedanía para proteger el paisaje que está en la memoria colectiva.

No son naturalistas ni especialistas en patrimonio natural, pero han pasado su infancia entre las charcas del rio Almanzora y los barrancos de la Sierra Almagrera. Han convivido con las infraestructuras abandonadas de las extracciones mineras y conoce cada palmo de esta sierra. Aquí han aprendido a localizar reptiles, anfibios, mamíferos y diferentes aves. Son testigos directos de la fascinación que sienten los visitantes a los que acompañan por los diferentes senderos antes los minerales que muestra esta sierra y quieren conservarla y ponerla en valor. Es el amor a su tierra lo que les mueve a protegerla y darla a conocer

Tras la declaración como ZEC de esta sierra, creen que ha llegado el momento de desarrollar diferentes iniciativas que pongan en valor el patrimonio natural y paisajístico de este enclave, apoyándose en la gran cantidad de infraestructuras mineras que quedaron en desuso a lo largo de la Sierra Almagrera